Arte en apoyo a la investigación científica

Una velada que unió solidaridad y arte llenó recientemente los espacios de la familia Montecchi en Campogalliano.

El evento fue el corazón de una iniciativa promovida por Modena Arts, una asociación fundada en 2021 con un objetivo ambicioso: fomentar la investigación científica en trasplantología abdominal y brindar apoyo a quienes enfrentan enfermedades graves de riñón, hígado y páncreas.

Guiado por una misión tan importante, el evento representó una oportunidad concreta para marcar la diferencia mediante la recaudación de fondos.

La velada comenzó con la cálida bienvenida de Danilo Montecchi:

"La solidaridad es un puente hacia el futuro, y es precisamente por eso que estamos aquí hoy".

A continuación, tomó la palabra el profesor Fabrizio Di Benedetto, presidente de Modena Arts y figura destacada en el ámbito médico-científico.

En su intervención, el profesor explicó que los fondos recaudados durante la subasta se destinarán a la compra de una máquina innovadora, esencial para el avance de los tratamientos. También destacó los logros alcanzados gracias a la colaboración entre instituciones, empresas y ciudadanos.

Este nuevo proyecto sigue el éxito del año pasado, cuando las donaciones permitieron la adquisición de una consola quirúrgica robótica, que hoy se ha convertido en una herramienta fundamental para las operaciones.

También estuvo presente en el evento el profesor Stefano Di Sandro, profesor asociado de cirugía en la Universidad de Módena, responsable de la unidad de trasplante de riñón y miembro de la junta directiva de la Fundación Modena Arts. Subrayó que una velada de tal intensidad no solo pone el foco en la investigación clínica, sino que también constituye un apoyo vital para la formación de nuevas generaciones de cirujanos, uniendo ciencia y solidaridad para generar nuevas perspectivas de atención.

El momento más esperado de la velada fue, sin duda, la subasta benéfica, un evento especial realizado en colaboración con el anticuario Mazzoli.

Las obras de grandes maestros contemporáneos dieron vida a una competencia que fue mucho más allá de la mera pasión por el arte. Cada oferta, cada aplauso, simbolizaba el deseo de marcar la diferencia y de apoyar una causa que trasciende la estética.

La atmósfera de participación y compromiso transformó cada adjudicación en un acto concreto de generosidad, un momento en el que el arte habló directamente al corazón.